Münik nos traslada a otra dimensión con su directo
El pasado 16 de Marzo se ponía a la venta ‘Otra Dimensión’, el primer EP de los chicos de Münik. Un mes más tarde, el 16 de Abril cumplían un sueño, el de subirse al escenario de la Sala Paddock de Madrid para presentar su primer trabajo en una noche en la que habían prometido sorpresas. Poco más tarde de las 21:30h y ante una abarrotada sala, Nika, Jordi y Aleix salían al escenario acompañados de su banda para darle a la noche su toque especial.
Los chicos de Münik liderados por Nika, nos daban la bienvenida a su dimensión con ‘Diferente Pero Igual’, tema elegido para abrir el show pero también su EP, mientras aprovechaban también para recordar sus comienzos como grupo con el que fuera su primer single, ‘Sígueme’. Con unas sonrisas que se contagiaban, Münik desprendió en todo momento una ilusión especial que se respiraba en el ambiente y unas ganas únicas de comerse el mundo haciendo lo que más les gusta.
‘Tan Lejos’ fue otro de los temas que pudimos disfrutar antes de viajar en el tiempo hasta aquel ‘Ser Yo’ o incluso a ‘Mi Vida Rosa’, temas que forman parte del que fuera el debut de la líder del grupo ‘Quien Dijo Que Era el Fin’. A medida que avanzaba el concierto era evidente la comodidad de los chicos de Münik sobre el escenario y poco tardó la cantante en despojarse de su chaqueta para seguir el concierto junto a su guitarra rebajando un poco el ritmo con su tema ‘Lento’ mientras el público demostraba que se sabía casi todas las canciones que estaban interpretando como fue el caso de ‘No Me Quiero Ir De Aquí’, canción que reflejaba el momento.
La gran sorpresa de la noche llegó cuando Nika presentó a su amigo Alberto Jiménez, líder de Miss Caffeina, quien en su día le compuso el tema ‘Esquimal’ y quien accedió a cantar con ella desde el primer momento en el que se lo ofreció aunque fuera con escayola incluida. Ambos nos hicieron vivir algo mágico uniendo sus voces en un dueto para el recuerdo. Durante este debut no faltaron versiones como la de ‘My Favorite Game’ de The Cardigans con la que hicieron disfrutar a todo el público mientras aumentaban la energía del concierto.
“Después de cuatro años que han sido duros y difíciles, ha llegado el día en el que tenemos que darle las gracias a la música por aguantar tanto y a vosotros,” decía Nika al ver que por fin su sueño se está cumpliendo y poco a poco se están abriendo camino en la música.
El concierto siguió con ‘Para Volver A Ti’, la balada favorita de la cantante con la que nos pusieron los pelos de punta dejando después a solas a Aleix y Jordi, que nos hicieron disfrutar de unos solos de guitarra y batería increíbles mientras Nika se reunía con ellos de nuevo para tocar con la máxima energía posible un tambor con purpurina llenando la sala de color mientras Jordi llegaba a emocionarse al ver que después de todo lo que han luchado, su sueño se está empezando a hacer realidad.
Una emocionada Nika no quiso desaprovechar la ocasión para dar las gracias a todos los sponsors que han apostado por ellos y que hicieron posible el concierto, al igual que agradeció a sus familias y a todos los que les han ayudado durante estos años dando paso después a su versión de ‘Painted By Numbers’ de The Sounds que fue seguido por su single ‘Sólo Amigos’ con el que hicieron cantar a toda la sala.
“Gracias por haber hecho todo esto posible,” decían antes de interpretar ‘Nadie’, el último tema de la noche con el que se despedían de un público que se fue con un gran sabor de boca después de habernos hecho vivir una noche llena de letras directas, melodías pegadizas y sonidos electrónicos muy únicos que mantienen una esencia rockera que les define como grupo. Fue una noche en la que no sólo vimos el lado más rockero y enérgico del grupo sino que pudimos ver también la parte más desgarradora donde disfrutamos de baladas de esas que se te meten en la sangre mientras las escuchas.
Sin duda, fue un primer contacto de Münik con el directo en un concierto en el que se dejaron la piel desde el principio enganchando a todos los que abarrotaban la Sala Paddock. Naturalidad, elegancia, ganas de pasárselo bien y sobre todo ganas de hacer disfrutar al mundo es lo que desprendieron en todo momento los chicos de Münik en su primer concierto en la capital en el que no pudieron tener mejor acogida porque el trabajo duro, el talento y la lucha tienen su recompensa y ellos ayer tuvieron la suya en lo que esperamos que sea el primero de muchos conciertos.
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