Melendi saca matrícula de honor en Las Ventas
Más de media España ha recorrido ya Melendi con su Gira Un Alumno Más y después del éxito que tuvo en su primera cita en Madrid en el mes de Mayo en el Barclaycard Center colgando el cartel de ‘entradas agotadas’, el asturiano regresaba a la capital el 19 de Septiembre y era el turno de abarrotar Las Ventas.
A las 21h se apagan las luces del recinto y con una puntualidad británica empezaba el concierto con su increíble intro ‘Siete Alumnos’ con toda la banda sobre el escenario. “Disfruta el momento,” se escuchaba entre las palabras de Melendi en esa intro y eso es lo que iban a hacer las miles de personas que allí le esperaban ansiosos mientras abría el show por todo lo alto con ‘Tú De Elvis y Yo De Marilyn’.
“Es todo un placer y un honor estar aquí. Me gusta empezar por las presentaciones y creo que no hay mejor manera de presentarme ante ustedes que con una canción que ha definido mi vida durante muchos años, de hecho hasta hace poco tiempo la ha definido muy bien. Así me presento, decía mientras interpretaba ‘De Pequeño Fue El Coco’.
Sin duda iba a ser una noche en la que íbamos a escuchar los temas de su último trabajo discográfico ‘Un Alumno Más’, pero tampoco iban a faltar muchos de los grandes éxitos que le han ido acompañando a lo largo de todos estos años.
“Hechas las presentaciones hay que pasar a las confesiones y esto no es un concierto si no se van sabiendo algo más,” así era cómo empezaba su ronda de confesiones que se iría alargando durante toda la noche y donde daba paso a ‘Septiembre’ y más tarde a ‘Un Violinista En Tu Tejado’.
A lo largo del concierto Melendi reconocía que es una persona que habla mucho porque le gusta introducir los temas que va cantando y así, entre anécdota y anécdota, llegábamos hasta canciones como ‘Mi Primer Beso’, ‘Calle La Pantomima’ o ‘Canción de Amor Caducada’ donde podíamos ver las manos de todo el público en el cielo de Madrid mientras les era imposible mantenerse en su sitio.
Con un público entregado al máximo durante toda la noche, el cantante se sentía como en casa, encantado y con una sonrisa reluciente, hacía gala una vez más de la simpatía, cercanía y humildad que tanto le caracterizan aportando al concierto más de un momento de risa gracias a sus anécdotas y a su sencillez.
‘Llueve’ y ‘El Amor Es Un Arte’ fueron otros de los temas de los que pudimos disfrutar durante la noche antes de dejar brillar a su corista Esmeralda mientras hacía su propia versión de ‘Como Una Vela’ a la guitarra hasta que Melendi retomó la canción haciendo bailar a todo un público que aprovechó cada segundo de la presencia del cantante en una noche en la que no cesaron las confesiones.
Pronto llegaba el momento de coger su guitarra con uno de los temas de su último disco. Con ‘Colgado de la Vecina’ demostraba que toca todo lo que se le pone por delante y que no sólo canta aunque poco duró la guitarra entre sus manos porque, imparable volvía a acercarse todo lo posible al público con ‘Barbie de Extrarradio’. De sonrisas iba la noche y bien sabido es, que el asturiano es todo un maestro en dibujarlas y en mostrar la suya rodeado de todos aquellos que le apoyan día a día y así, nos conquistaba una vez más con ‘Con Solo Una Sonrisa’ antes de desaparecer del escenario.
Continuando la temática colegial, cambiaban de uniforme tanto él como su banda para seguir dando lo mejor de ellos al ritmo de uno de sus temas más rockeros como es ‘Somos’ aunque pronto llegaba la calma con uno de sus temas más crudos. Una de esas canciones que emocionan cada vez que la escuchas y donde la sección de violines se unía para crear un momento de lo más especial interpretando ‘Saraluna’ poniendo a todos los asistentes un nudo en la garganta con los pelos de punta. .
La emoción del momento terminaba enseguida poniendo al público a cantar con su ‘Lagrimas Desordenadas’ y después de una lección para los más jóvenes con su ‘Cierra Los Ojos’, Melendi avisaba de que se acercaba un momento importante ante lo que los gritos de su nombre retumbaban en el recinto. “Es un tema muy importante, el mas importante que he compuesto en mi vida y que les compuse a ustedes. Son un pilar fundamental en mi vida y evolución. Os debo mucho más aparte de esto. Estuvisteis conmigo cuando nadie más me defendía,” se sinceraba el asturiano emocionado y dando paso a ‘Cenizas en la Eternidad’, todo un himno para sus guerreros que iluminaron Las Ventas con las luces de sus móviles.
Melendi nos hacía volver a 2006 con ‘Loco’ pasando acto seguido hasta ‘Posdata’ y continuando el concierto contándonos cómo en cada uno de sus discos hace un pequeño psicoanálisis y en éste último, ‘Un Alumno Más’, se proclamaba seguidor de ‘La Religión de los Idiotas’ poniéndose después de lo más romántico con ‘Tu Jardín Con Enanitos’ abandonando después el escenario.
Pronto reaparecía para sincerarse y transmitirnos sus pensamientos. “En el mundo en el que vivimos a veces nos olvidamos de lo más importante, buscar nuestra felicidad… Los complejos vamos a mandarlos a tomar por culo,” decía mientras sorprendía al público quitándose la camiseta reconociendo que hay que vivir la vida, y que no podemos ser perfectos y así llegábamos hasta ‘Un Alumno Mas’ donde demostraba que lo de tocar el piano tampoco se le da nada mal.
“Ahora llega otro tema importante, otro de mis favoritos,” nos contaba mientras presentaba ‘Cheque al Portamor’, haciendo que el público cantase a pleno pulmón junto a él antes de presentar a su banda de una manera muy especial. Como si de un partido de baloncesto se tratase, cada uno de los componentes de la banda tenía que lanzar a canasta mientras Melendi les iba presentando sintiendo la presión de tener miles de ojos puestos en ellos.
El concierto iba llegando a su fin y nos contaba cómo surgió uno de los temas más románticos que ha compuesto como es ‘La Promesa’, tema en el que volvimos a ver de nuevo el recinto iluminado por el público. La traca final para cerrar una noche inigualable, estaba compuesta por ‘Tocado y Hundido’ y uno de sus temas más sinceros como es ‘De Repente Desperté’ donde podíamos ver al cantante agradeciendo a todo el público el hecho de haber abarrotado Las Ventas.
“Hagamos que no todos los sueños sean durmiendo,” eran unas de las últimas palabras de Melendi despidiéndose de la capital después de dar un recital de sencillez. El asturiano volvió a regalar otra noche para el recuerdo a todos los asistentes y se ponía a los pies de un público incansable que no bajó el ritmo en ningún momento al igual que él se dejó la piel cantando, animándoles y acercándose lo máximo posible a ellos. Sin duda, una noche en la que Melendi salió de Las Ventas por la puerta grande y con matrícula de honor.
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