Rayden y Bely Basarte prenden fuego a Las Noches de Río Babel
El 10 de julio, los protagonistas de Las Noches de Río Babel no eran otros que Bely Basarte y Rayden. Llegaban con ganas de reencontrarse con Madrid dentro de un festival que le pondrá música a sus noches durante julio. ¿Dónde se daban cita los artistas con su público? Nada más y nada menos que en el Wanda Metropolitano respetando las medidas de seguridad.
La primera en subirse al escenario aquella calurosa noche era Bely Basarte a las 21 horas. En pleno comienzo del desarrollo de su era psicotropical, Bely haría sentir al público muchas emociones a través de sus canciones y de su forma de interpretarlas. El viaje, empezaba con ‘Roma’ y ‘Me Miento Mal‘ mientras nos preparábamos para navegar entre sus dos trabajos discográficos.
“¡Qué bonito que esté ocurriendo esto!” decía con ilusión, agradecida por el regalo de estar en ese escenario y sobre todo, por tener un público así delante. “Hace un año nadie nos habría dicho que estaríamos en un estadio,” y ahora que todo ha cambiado, se demuestra que la cultura es segura.
Rodeada por sus mejores amigos en el escenario, disfrutábamos de ‘Espiral‘, ‘Mientras Tanto‘ o un ‘Mariposas‘ con el que se oían los cánticos con fuerza. Aquella noche, Bely cumplía un sueño volviendo a tocar en Madrid, con toda la banda y además, en un sitio tan increíble como el Wanda.
Era una ocasión perfecta para ver cómo intercalaba canciones de sus dos primeros discos consiguiendo el balance perfecto y haciendo que el público no le quitase el ojo ni un segundo. Magnética y dulce a la vez, interpretaba ‘C’est La Vie‘, ‘Flores y vino‘ o ‘Acércate‘ antes de brindarnos una sorpresa muy esperada.
‘Vía de Escape‘ empezaba a sonar y con ella, Rayden era recibido en el escenario de Las Noches de Río Babel uniéndose a Bely Basarte. Lo hacía entre aplausos mientras fundían sus voces. Derrochaban esa complicidad que les caracteriza y ahí no quedaba la cosa porque también cantaban ‘Malditas Ganas‘ convirtiéndose en un hasta pronto para el cantante.
Basarte seguía poniéndole música al festival con ‘No te quiero ver llorar‘ o ‘San Pedro‘ y en una noche tan especial, tenía un as bajo la manga. Llegaba el momento perfecto para regalar a la capital su nuevo single ‘Tomando tequila‘. Con él, hizo mover la cabeza y cantar a los asistentes preparándoles para lo que está por venir próximamente. Fue una actuación donde tocó la guitarra, el piano y donde disfrutó de cada centímetro del escenario y ante eso, Bely ponía el broche final con una vieja conocida como ‘Somos Fuego‘ cerrando con ‘Me va a doler‘ con la que se despedía por todo lo alto.
Tras un pequeño respiro, Rayden tomaba el escenario para prenderle fuego. Se notaba en el ambiente desde el minuto cero con canciones como ‘Dios Odio‘, ‘Gargantua‘ o ‘No hago rap‘ con las que regalaba un comienzo imparable, de infarto.
“No sé qué le diría a mi yo de 10 años,” contaba sin creer dónde estaba tocando ni mucho menos que por fin, estuviera ante Madrid, disfrutando de su calor. Así, llegaba ‘A mi yo de ayer‘ seguido muy de cerca por ‘Itaboy‘, ‘Habla Bajito‘ o ‘Finisterre‘. Era una noche de altura y por eso, Rayden optaba por hablar poco y cantar mucho. Quería que el público disfrutase de principio a fin con sus canciones y con su forma de comerse el escenario junto a Mediyama y su banda.
“Hacéis bien en estar sentados pero hemos venido a dejarnos la vida,” advertía. Quien advierte, es por alto y siguió a golpe de éxitos sin bajar ni un segundo la entrega. En una noche así, no faltó ‘Don Creíque‘ ni mucho menos ‘Pólvora mojada‘ o ‘El mejor de tus errores‘, un auténtico dardo al corazón.
El cantante, aprovechando la ocasión, hacía un pequeño alto en el concierto. Allí, contaba cómo de pequeño, los viernes iba a dormir a casa de sus abuelos en Canillejas. Desde ahí, se veía una explanada hasta la que daban paseos. Fue creciendo y un día, construyeron La Peineta. Por circunstancias de salud, sus abuelos se mudaron a Barcelona y no supieron que la remodelaron ni que construyeron el estadio de su equipo, el Atlético de Madrid.
“Nadie puede tener éxito sin compartirlo con sus abuelos y sus abuelas y hoy su nieto, toca aquí,” decía lleno de orgullo, cumpliendo un sueño y recordando a aquel niño pequeño.
En ese punto de la noche, aparecía Bely Basarte y juntos, brindaban a la capital su particular ‘Careo‘ con el que demuestran que se entienden a la perfección porque cuando la música habla, poco más hay que añadir.
La recta final llegaba con ‘Imperdible‘, ‘Haciéndonos los muertos‘ o un ‘Haz de Luz‘ que faltaba con Madrid cantando más fuerte que nunca. Ahí no quedaba la cosa porque Rayden sacaba su lado más romántico con ‘La mujer cactus y el hombre globo‘ y se despedía como no podía ser de otra forma, iluminando el Wanda con ‘Matemática de la Carne‘.
